Cortar el queso gorgonzola dulce en cubos. Introducirlo en la licuadora y accionarla hasta reducirlo en una crema. Alinear las copitas. Llenar la manga de pastelería con el queso y proceder a rellenar las copitas hasta la mitad. Dividir el queso mascarpone en tres soperas y salar ligeramente. En este momento aromatizar el mascarpone: una sopera con el jengibre fresco rallado; otra con una pizca de azafrán; la última con las nueces trituradas. Terminar de rellenar las copitas, acompañando a la base de queso gorgonzola una de las mezclas de queso mascarpone. Poner en la licuadora también el queso gorgonzola natural y licuar. De esta forma se obtendrá una mezcla de los dos tipos de quesos gorgonzola con la cual se rellenarán las copitas. Adornar cada copita con verduras cortadas inas o con nueces. Acompañar con pan tostado.